
July 20th, 2006. My grandmother turned 95.
We had a get together at Cafe Mozart, a very nice little tea parlor in the cut glass, wood floored venetian style.
Cakes, teas, and all my grannies favourite things. She does really enjoy eating, and being surrounded by fawning admiration, so her birthdays are always joyous events.
She did remind the young uns (my 27 year old cousin is the Jurgenest of us (4)) to start getting married and having her great grandchildren (in that very defined order). Only Rodrigo is married, and that was only two weeks ago.
Maria Valenzuela de Palma has lived an extremely full life, and still does to this day. Time has not passed without its tolls, but she has steamed across the sea more than a few times, flown about to the far reaches, and been driven all about Chile. Her memory for times past is quite remarkable. She can remember so much, especially with regards to family ties and food. And when these two coincide, caveat emptor!
When we were young (er), my sister and I would look at each other all cross eyed as soon as conversations turned to De La Barras, Riescos, Palmas, Valenzuelas, and the infinite variations. I still get a far away look in my eyes, not much for that.
But she has surpassed so many of her generation who have passed on, but it unknowing preparation, she has always know how to befriend one and all, age be damned.
----------------------------------------------------------------------------------------------------
----------------------------------------------------------------------------------------------------
Mi Abuelita no es muy gatera, pero es uno de los pocos puntos negativos que tiene.
El Jueves cumplio 95. Una edad no menor. No se si son los ojos uno de los pocos componentes del cuerpo que no se renuevan completamente, o tal vez es el cerebro, pero seamos poeticos y imaginemosnos que son los ojos.
Esos ojos, ahora mas pequenos, y con menos luz, han estado presentes en la tierra desde 1911. Han visto y conocido tantas personas, han estado en Montreal en los inviernos de sub 25 grados, se han paseado por Paris con su marido quien yo nunca conoci, han visto el mar donde no se ve tierra, y vieron nacer y crecer a sus cuatro hijos, y cuatros nietos.
Aun conservan la memoria de tiempos pasados, pero no se quedan ahi. Siempre ha admirado esa capacidad de estar vigente, de poder conversar con mis amigos, con la gente que quiero, y ser la abuelita postrada. Siempre la chispa, el humor, y los consejos.
El Jueves nos juntamos en el Mozart, ahi en Luis Pasteur (creo), y disfruto la presencia de todos los que fuimos, pero a veces sospecho de los cheesecakes, y tes Twinning tienen una importancia tremenda en su disfrutar de la ocasion.
En un cumpleanos muy reciente, la celebracion fue en el Cachafaz, un club de Tango en Providencia. Su goce maximo fue la adulacion torrencial que recibio, aplausos, saludos de los respetables presentes. No podia mas.
Bueno, espero llegar tan bien a esa edad...
3 comments:
Excelente!
La llamé despues de su cumpleaños y cantamos a coro el japiberdei.
Estaba emocionada con quienes la queriamos y le explique que lo que se siembra se cosecha. y María Valenzuela López ha sembrado buena voluntad y cariño por todos lados. Está rebien que coseche.
Para mí, la gente mayor en general es como una ventana al futuro. Ahí ves cuáles son las consecuencias de tus actos -a largo plazo= y cuáles son las cosas que recordarás y las que importan. Por eso es un lujo tener a una abuelita como la tía Marita, como le dicen tantos, que sabe expresar todas las respuestas a las secretas preguntas que una tiene.
Primo
Mi abuela es una institución!
besos
C.
Post a Comment